Así como –en lo personal– nos proponemos leer más, hacer ejercicio o comer sanamente, también debemos trazar nuevas metas para que nuestro emprendimiento se fortalezca.
Las malas costumbres también llevan a poner en dificultades nuestros negocios. De hecho, esos hábitos con frecuencia son ignorados por los emprendedores, al punto que no somos conscientes de qué tan drásticamente limitan nuestro crecimiento personal y profesional.
Como todo propósito, la rutina es difícil de vencer y es por eso que, la buena voluntad se esfuma a medida que van pasando los días. Si para una persona, comenzar a tener espacios para leer, hacer ejercicio o aprender un idioma, es algo complicado, no nos imaginamos cómo debe ser para una organización, cualquiera que sea su tipo.
Ser reactivo en lugar de proactivo
Establecer metas y planear a futuro, es clave para el éxito, pero desafortunadamente muchos emprendedores no siempre están mirando hacia adelante. Es importante establecer metas, que ayuden a pensar a corto, mediano y largo plazo, y así construir hábitos saludables que los fortalezcan. Para comenzar el año de la mejor manera, debemos empezar definiendo claramente nuestros objetivos para el próximo año. Los mejores profesionales son proactivos y se preparan para conseguir sus objetivos, de manera anticipada, para evadir cualquier obstáculo que pueda aparecer.
Ignorar la optimización móvil
La optimización móvil, es clave para cualquier negocio, especialmente para aquellos que buscan llevar al consumidor hacia su página web. Una inversión en tecnología móvil, ayudaría a incrementar la eficiencia y los ingresos.
Recibir críticas, dura tarea
Uno de los hábitos más duros de dejar, es el de tomar las críticas de forma constructiva, sin ofenderse. Todos hemos pasado por esto; un cliente nos dice que nuestro producto no es muy bueno, o un empleado se queja de nuestro estilo de trabajo; esto puede ser desalentador. Sin embargo, en lugar de tomar las críticas de forma dura, escuchemos atentamente los comentarios y la retroalimentación que recibimos; podemos aprender mucho, si logramos superar lo negativo.
Para sacar el mayor provecho de las críticas y convertirlas en algo positivo, resulta bastante útil tener en cuenta que, los comentarios hablan tanto de nosotros, como de la persona que los formula. Tener esto en cuenta, permite tener una perspectiva diferente y más objetiva, sobre lo que podemos tomar como una oportunidad para progresar, y lo que podemos desechar de cada crítica que recibimos.
No separar el trabajo de la vida personal
Es normal sentirnos abrumadas por nuestras responsabilidades. Nuestras horas se convierten en días, y los días en noches, y separar el trabajo de la vida personal se convierte en algo cada vez más difícil.
La incapacidad de separar nuestro trabajo de nuestra vida personal, es el número uno de los malos hábitos de nuestros negocios, que quisieran eliminar en el año siguiente. Empecemos por llevar una agenda con nuestras actividades diarias, manteniéndola lo más precisa posible, para que logremos ejecutar tareas, tanto profesionales como personales.
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