No cabe la menor duda que el fenómeno en el que se convirtió Harry Potter es mundialmente conocido, sin embargo, son pocos los que conocen la historia llena de superaciones y éxitos, que se esconde detrás de la autora del famoso mago.
Joanne Kathleen Rowling, mejor conocida como J.K. Rowling, nació un 31 de julio de 1965 en Inglaterra, desde pequeña disfrutaba de escribir historias fantásticas, motivo por el cual, cuando tuvo que elegir una carrera decidió dedicarse a la Filología clásica, en la Universidad de Exeter.
Rowling realmente tenía una vida común, hasta que un día de Junio de 1990, durante un viaje retrasado de Manchester a Londres, la idea de Harry Potter surgió en su cabeza.
«De repente, la idea de Harry apareció en mi imaginación, simplemente. No puedo decir por qué, o qué la desencadenó, pero vi la idea de Harry y de la escuela de magos, muy explícitamente”
Sin embargo, en diciembre del mismo año, tras luchar contra la esclerosis múltiple, su madre fallece sin siquiera conocer el nombre del mago que llevaría a la gloria a su hija. Debido a esta pérdida, J.K. cae en una depresión que afecta su trabajo como escritora, razón por la que decide cambiar de residencia a Oporto, Portugal, donde se dedica a dar clases de inglés.
Dos años después, Rowling contrae matrimonio con el periodista Jorge Arantes, con el que procrea a su hija Jéssica, no obstante, su matrimonio se ve inmerso en violencia domestica, por lo que J.K. decide huir a Edimburgo con su pequeña.
Pero a pesar de encontrarse lejos de su ex-marido, la escritora continuaba peleando la custodia legal de su pequeña, periodo que la lleva a caer en una fuerte depresión clínica, a causa de la falta de empleo, ya que solo vivían de la beneficencia que les otorgaba el gobierno.
«Cuando dices que el dinero no importa, es que siempre lo has tenido. Pero cuando te faltan dos peniques para comprar guisantes en lata, y tu hija tiene hambre, el dinero importa. Cuando te planteas robar pañales en la tienda, el dinero importa»
Del anonimato a la fama
Parecía que la escritora estaba viviendo su peor época, pero Rowling jamás se rindió, y para 1995 ya había terminado el manuscrito de “Harry Potter y la piedra filosofal”, por lo que decidió probar suerte en diversas editoriales, doce para ser exactos, pero no cosechó ningún éxito.
No fue sino hasta 1996, que el editor Barry Cunningham, presidente de una pequeña editorial llamada Bloomsbury, le dio a leer a su hija Alice el primer capítulo de la obra literaria, la cual dejó a la pequeña niña de ocho años, totalmente fascinada.
Y aquí comenzó la magia para J.K, pues con el lanzamiento del primer libro, logró vender cien ejemplares, pasando de recibir 345 dólares mensuales a 3,188, pero para el cuarto libro, logró superar las 370 mil copias en un día. El éxito en el que se convirtió Harry Potter fue tan descomunal, que para el último libro, Rowling llegó a vender un millón de ejemplares en tan solo 24 horas.
Hoy en día, Rowling es una gran inspiración para millones de mujeres en todo el mundo, pasó de no tener nada a ser la primera persona en convertirse en millonaria por escribir libros, según la revista Forbes, además de transformarse en una gran filántropa y apoyar a instituciones de caridad, como Multiple Sclerosis Society of Great Britain.
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