Mujer piloto mexicana

«Una infancia muy bonita, era más una infancia de deportista, porque siempre me la vivía activa; muy involucrada en los coches, no jugaba a las Barbies o a ‘la cocinita», yo jugaba en los videojuegos o coches.»

Alexandra Mohnhaupt

Alexandra Mohnhaupt es, sin duda alguna, un orgullo mexicano, al ser de las únicas cuatro mujeres pilotos alrededor del mundo: En Alemania, dentro de la Fórmula 4; en Inglaterra, en la Fórmula 3 y otra en pruebas en la Fórmula 1; y en México, Alexandra Mohnhaupt, en la Fórmula 4.

Originaria de Puebla y a sus tiernos 17 años, ha demostrado tener aptitudes y habilidades para destacar en un mundo donde la mayoría son hombres: los autos de carreras. Desde que era una niña de nueve años, supo que su pasión eran las carreras de coches, al subirse a un Go Kart, alcanzando los 80 kilómetros, queriendo más y más. Llegó a salir victoriosa más de 200 veces en carreras con esos mini coches. Posteriormente, subió a la Fórmula 4, mientras que este año ha corrido en la Fórmula 3, en Europa.

«Al principio era más nerviosismo, pero te acostumbras a la velocidad: no siento cuando voy en una curva a 120 o más, hasta que bajo la mirada y se ve a qué velocidad. Me encuentro concentrada en lo que hago y en cómo ir más rápido.»

Su madre, oriunda de Puebla, y su padre, originario de Alemania, así como sus hermanas mayores, siempre le han brindado infinito apoyo para que ella cumpliera sus sueños.

Desde que es una pequeñuela, siempre ha tenido interés y habilidades para los deportes, pues llegó a alcanzar la cinta negra con rojo, en taekwondo. Asimismo, entrenaba en el Club de Fútbol Barcelona, incluso tuvo la oferta de competir en el Club Catalán en España.

Sin embargo, ambos deportes los dejó cuando supo que su verdadera pasión eran los coches. Su padre, quien siempre la alentó a seguir sus sueños, le regalaba autos Hot Wheels desarmados, para que ella los armara.

Cabe destacar que, en su primera carrera profesional, obtuvo la tercera posición, para después, ser cinco veces campeona nacional, participando en dos mundiales de la especialidad, con excelentes resultados.

«Después de probar la victoria, es en lo único que te enfocas: ganar.»

En un mundo de hombres, no fue nada fácil destacar, pese a su talento, pues al principio era penalizada muy a menudo, sin razón alguna. Sin embargo, aún yendo en último lugar debido a las penalizaciones, lograba colocarse en los primeros lugares nuevamente, siendo merecedora del pódium. Fue así como se ganó el respeto de todos, demostrando sus habilidades y de lo que es capaz.

@ExitoFem