Fernanda Melchor es una escritora veracruzana que rompe todos los esquemas. La fuerza de su lenguaje es evidente, mientras su narrativa la ha convertido en una autora que ha roto con muchos tabúes y es atractiva a generaciones jóvenes que buscan entre sus páginas un espejo de la realidad.
A los 31 años alcanzó el reconocimiento con Temporada de huracanes, obra que escribió durante el último año que vivió en Veracruz. Al iniciar no encontró apoyos económicos en instituciones culturales y educativas, por ello decidió lanzar una moneda al aire: «Si sale bien, me dedico, si no, renuncio a la mafufada de escribir y me olvido de todo». Ahora es una autora sólida.
Ella inició desde los 15 años sus primeros intentos de contar historias. En la década de sus 20 inició a escribir su primera novela. Sus referencias literarias y fílmicas la hicieron dar el primer paso y poco a poco comenzó a realizar cuentos.
Es la editorial Almadía donde obtiene su primera oportunidad. Publica la novela Falsa Liebre, además de un libro de Crónicas, todo con el objetivo de alzar la voz ante las violencias que padecen los habitantes del puerto de Veracruz.
La jarocha asegura que siempre pensó que la literatura mexicana era sólo de temas revolucionarios, sin embargo, cuando leyó a Juan Rulfo halló la inspiración que buscaba. “Leí Macario, a Ibargüengoitia, me fascinó su combinación de registros entre lo coloquial y lo elevado”, explica la autora.
Asimismo, cuando leyó a José Agustín con La tumba y Se está haciendo tarde, le cambió la perspectiva. Ella siempre había querido hacer algo similar con el estilo. “Yo había querido hacer eso con mi prosa. Contar las cosas desde muchas perspectivas e incluir el lenguaje coloquial, los albures. Quería escribir acerca de lo que es ser joven”.
Un sello dentro de las obras de Melchor es la gran presencia que tienen los hombres. Ella no tiene un porqué, afirma que siempre vivió rodeada de varones. “Ellos son un misterio y me fascinan en el sentido de que trato de entender por qué somos tan diferentes y al mismo tiempo por qué los entiendo tan bien”, narra Fernanda.
Aunque nunca estuvo cerca de personas pertenecientes al ámbito intelectual, a ella siempre le gustaron mucho los libros. Le decían “La Pequeña Larousse” porque leía todo, cuando alguien no sabía la respuesta, ella siempre respondía. Destacó por su buena memoria y gusto por el lenguaje.
Para ella, las letras siempre fueron un espacio de libertad absoluta, sin embargo, nunca quiso estudiar Filosofía y Letras, pues creyó que iban a obligarla a leer y para ella la lectura es un acto de autonomía. Por ello estudió Periodismo en la Universidad de Veracruz.
Fuentes consultadas
CHILANGO (2021). “Fernanda Melchor brinda voz a las víctimas de la violencia”. Disponible en: https://www.chilango.com/cine-y-tv/fernanda-melchor-brinda-voz-a-las-victimas-de-la-violencia/
LA JORNADA (2021). “La escritora más fuerte: Fernanda Melchor”. Disponible en https://www.jornada.com.mx/notas/2021/03/14/cultura/la-escritora-mas-fuerte-fernanda-melchor-elena-poniatowska/